
Hoy vives en mi
En el Ecuador el 4 de marzo de 2011, al momento de aprobarse y entrar en vigencia la ley de donación y trasplante de órganos, este se volvió un tema muy importante del cual hablar, ya que el objetivo del mismo es salvar o mejorar el estilo de vida de una persona que necesite ser intervenida con este proceso, por lo cual es importante conocer los pasos a seguir para ser beneficiado con este procedimiento.
El 23 de julio del 2015 Carlos Alfonso Maldonado González, sufrió un accidente de tránsito en la Parroquia Calderón del Cantón Quito, al instante que se suscitó el hecho los vecinos llamaron de manera inmediata al 9-11 para que asistieran al herido. Después de algunos minutos la ambulancia llegó al lugar de los hechos y llevo de carácter urgente al paciente al hospital del IESS San Francisco ubicado en el sector de Carcelén.
En el hospital San Francisco no contaban con los instrumentos necesarios para atender las heridas del señor Carlos Alfonso, por lo cual fue trasladado al hospital Carlos Andrade Marín donde contaban con más implementos médicos para atender al paciente, el cual para entonces ya se encontraba en situación crítica, ya que el accidente que sufrió había sido más grave de lo que parecía.
Al llegar la madrugada del 24 de julio, todos los familiares se enteraron que el paciente había fallecido, fue un momento devastador para todos y más aún porque el señor Maldonado se encontraba con un estado físico envidiable para una persona de su edad, no tenía ningún problema de salud, así que la noticia fue inesperada y catastrófica para todos.
Después de varios minutos uno de los hijos del fallecido se acercó a los familiares que se encontraban la sala de espera del hospital para indicarles, que su padre en vida había tomado la decisión de donar sus órganos. Todos quedaron sorprendidos, pero a la vez aceptaron el pedido del difunto, ya que todos eran conscientes de que este gran gesto iba a salvar y mejorar varias vidas.
El proceso de extracción de órganos y tejidos inició después de pocas horas de haber tomado la decisión; esposa, hijos, hermanos, sobrinos y demás esperaron ya resignados de volver a ver el cuerpo con vida, pero con la satisfacción de que hasta el último momento el fallecido fue una gran persona y donó sus órganos para salvar algunas vidas.
Todos desconsolados y con mucha preocupación porque el cuerpo aún no salía del quirófano, empezaron a preguntar qué sucedía, sin saber que este era un proceso muy largo. El occiso fue entregado a sus familiares el 25 de julio del 2014 después de dos días de haber fallecido, toda la espera y sufrimiento para esta familia fue un acto de bondad para que una persona necesitada de algún tipo de trasplante pueda disfrutar de más y mejores momentos con sus seres queridos.
Un potencial donante representa una vida que podrá ser salvada a futuro, así como un órgano sano listo para trasplantar es una vida que se salva en ese momento, la donación y trasplante trata de entregar a las personas lo que en cierto modo la vida les arrebató, el señor Carlos Alfonzo Maldonado Gonzales quien en vida había decidido donar sus órganos, en ese preciso momento brindaría la oportunidad a varias personas, mas por su gesto de buena voluntad con sus semejantes.
Todos sin excepción pueden ser donantes potenciales, basta con decidir, basta con tener las ganas de ayudar a los demás, la buena voluntad no mide clase social, color, sexo, ni religión, las razones van más allá del interés personal, mas allá de los problemas por los que pueden pasar, la única razón nace del corazón, para que otros puedan gozar un estilo de vida al que en ciertos casos quizás jamás estuvieron acostumbrados y en otros hasta salvar una vida.










En el país existe una gran cantidad de personas que han sido beneficiados con el proceso de trasplante y donación de órganos, aunque está práctica en el Ecuador es desconocida por la mayoría de las personas. Pero existen historias como la de Juan Buitrón y su familia, en la cual este problema se presentó de la manera menos esperada. Parte de una molestia en su ojo derecho, él y sus padres preocupados por ese malestar que persistía deciden acudir a un especialista, quien les explica que la enfermedad estaba presente desde hace algunos años.
Consternados, Juan y su familia empiezan a recordar que años atrás se sometió a un examen visual en una óptica, aquí los profesionales no les informaron sobre el problema que tenía Juan y solo les dieron un diagnostico en el cual él debía usar lentes. Si en este centro oftalmológico les hubieran informado acerca del problema que tenía Juan, la enfermedad hubiera sido controlada a tiempo y no hubiera tenido la necesidad de realizarse el trasplante de corneas.
A veces, las cosas suceden porque las personas están confiadas que nunca van a enfrentar este tipo de problemas, no se toman las precauciones necesarias para evitar futuros inconvenientes, así es como de un momento a otro Juan y su familia vivieron una experiencia dura de sobrellevar, en ocasiones hasta llegaron a perder la esperanza, pero la fe y la unión familiar siempre los mantuvo con la frente en alto para poder superar esta dura prueba.
El apoyo de la familia en estos casos es primordial, la tranquilidad y el soporte que brindan las personas que rodean al paciente lo llenan de esperanza y ganas de aferrarse a la vida, la cual a Juan le había cambiado en contados días, su madre, a pesar que estaba en juego la salud de su hijo, nunca perdió la ilusión, en que la institución que lo trataba iba a realizar el mejor trabajo.
La recuperación en este tipo de procedimientos, representa una parte importante para que el órgano sea aceptado por el cuerpo del paciente, a Juan le toco un recuperación un tanto drástica ya que al tratarse de una cornea el proceso de trasplante se torna delicado, después de la cirugía Juan debía seguir al pie de la letra las indicaciones que le dio el médico para que el resultado de la operación sea exitoso.
Los medicamentos debían ser suministrados con sumo cuidado por su madre, para que los puntos que fueron suturados en el procedimiento puedan ser retirados por el especialista sin riesgo, hasta el momento se le han quitado 4 de 16 puntos, en el transcurso de 8 meses, Juan espera que en los próximos dos meses los puntos sean extraídos en su totalidad.